La Agencia Nacional para la Prevención de la Corrupción (NACP) de Ucrania ha añadido al operador independiente belga de sistemas de gas Fluxys a su lista de patrocinadores internacionales de la guerra.
Según el servicio de prensa de la NAPC, la decisión se tomó basándose en el incumplimiento por parte de la empresa de los Principios Rectores de la ONU sobre Empresas y Derechos Humanos y su continua promoción de la exportación de gas natural licuado (GNL) ruso perjudicial para el clima, que proporciona recursos financieros para la invasión rusa de Ucrania.
«A pesar de la invasión rusa a gran escala en curso, el operador independiente belga de infraestructuras de gas Fluxys sigue prestando a Yamal LNG, filial de Novatek, servicios de almacenamiento y transbordo de GNL en su terminal de Zeebrugge. Estos servicios permiten exportar a Rusia ingresos adicionales para Novatek e ingresos fiscales para el régimen del Kremlin, que está cometiendo innumerables crímenes de guerra en Ucrania. Gracias a los hechos aportados por organizaciones de la sociedad civil ucraniana y belga, hemos encontrado motivos suficientes para añadir a Fluxys a la lista de patrocinadores internacionales de la guerra», declaró Agiya Zagrebelska, Jefa del Departamento de Minimización de Riesgos de Corrupción de la Política de Sanciones del PNCS.
El operador belga Fluxys suministra instalaciones de almacenamiento y transbordo de gas natural licuado a Yamal LNG, una empresa conjunta participada mayoritariamente por la compañía gasística rusa Novatek, directamente implicada en la financiación de la agresión militar y los crímenes de guerra en Ucrania. Un análisis detallado realizado por el Instituto Internacional de Economía Energética y Análisis Financiero (IEEFA) en 2022 demostró que Fluxys y sus accionistas se beneficiaron al facilitar la exportación de GNL ruso a los mercados de Asia, Sudamérica y Oriente Medio, especialmente en los meses de invierno de 2021/2022, lo que agravó la crisis energética europea y aumentó los beneficios de Novatek.
«Los riesgos reputacionales asociados con ser catalogado como patrocinador de la guerra y potencialmente ver rebajada su calificación crediticia no son exclusivos de Fluxys. Al seguir participando en las transacciones de GNL ruso, Fluxys podría enfrentarse al riesgo de ser objeto de sanciones secundarias por parte de Estados Unidos, sobre todo teniendo en cuenta que, al parecer, Novatek está contribuyendo directamente a la guerra de agresión de Rusia, con investigaciones que sugieren que los guardias de seguridad de la empresa fueron utilizados para formar unidades militares especiales que participaron en los combates en Ucrania», afirmó Svitlana Romanko, fundadora y directora de Razom We Stand.
En respuesta a la guerra de agresión no provocada e ilegal, muchas empresas cesaron toda interacción comercial con socios rusos después del 24 de febrero de 2022, pero Fluxys siguió cooperando con Yaman LNG y Novatek a lo largo de 2022 y en 2023. Los expertos calculan que Rusia espera recibir hasta 800 millones de euros en ingresos fiscales por las exportaciones, lo que es posible gracias al transbordo de GNL en Zeebrugge en 2023. Sólo el 7% de este gas se destina a los mercados de la UE. Fluxys recibe 50 millones de euros al año por este servicio en virtud de un contrato a largo plazo firmado en 2015, un año después de que Rusia se anexionara Crimea e iniciara la guerra en Donbás.
Novatek, propiedad de los oligarcas rusos Leonid Mikhelson y Gennady Timchenko, es el principal proveedor de gas natural licuado ruso a los mercados internacionales. Mikhelson y Timchenko son miembros del círculo íntimo del presidente ruso Vladimir Putin y, con la ayuda de su régimen, se han hecho con participaciones en proyectos rusos de petróleo y gas. «Novatek» es el mayor productor privado de gas natural de Rusia. En julio de 2014, Novatek fue incluida en las listas de sanciones de Estados Unidos y Canadá. En 2016, Estados Unidos impuso sanciones a varias filiales de Novatek. El 2 de noviembre de 2023, Estados Unidos impuso sanciones al proyecto Artsyl LNG 2, que pretendía duplicar la capacidad de exportación de Novatek.
En octubre, Razom We Stand, en nombre de 23 ONG ucranianas, envió una carta abierta al Gobierno federal belga pidiéndole que tomara la iniciativa de imponer una prohibición total del transbordo de GNL ruso en todos los puertos de la UE, incluida la terminal de GNL de Zeebrugge, operada por Fluxy. Los Países Bajos y el Reino Unido ya han introducido prohibiciones de este tipo.
Los principales accionistas de Fluxys son los municipios belgas (77,41%) y el gobierno federal belga (3,44%). Ambas partes se han comprometido a mantener el aumento de la temperatura global por debajo de 1,5℃ apoyando el Pacto de los Alcaldes y el Acuerdo de París, respectivamente. También afirman tener un gran respeto por el Derecho Internacional Humanitario, que prohíbe los ataques intencionados contra civiles o infraestructuras civiles críticas. Estos compromisos contradicen la continuación real de la cooperación con la empresa rusa Novotec.
