Las pérdidas aseguradas por catástrofes naturales durante 9 meses de 2024 superaron la media y ascendieron a 102.000 millones de USD, cifra superior a los 88.000 millones de USD del año pasado y a la media de 79.000 millones de USD.
Así se recoge en el informe del grupo de corretaje global Aon «Global Catastrophe Review for the third quarter – October 2024» publicado en su página web.
Se señala que los efectos del huracán Milton y otros sucesos previstos para finales de año podrían dar lugar a pérdidas aseguradas anuales superiores a los 125.000 millones de USD registrados en 2023.
Según el informe, desde principios de 2024 se han producido al menos 280 grandes catástrofes naturales en todo el mundo, que han provocado pérdidas económicas de al menos 258.000 millones de USD, lo que supone aproximadamente un 27% menos que la cifra correspondiente al periodo de nueve meses de 2023, de 351.000 millones de USD, y por debajo de la media de 277.000 millones de USD.
Aon señala que entre el primer y el tercer trimestre, las pérdidas aseguradas por grandes riesgos fueron relativamente bajas, y ningún evento demostró el potencial de tener un impacto significativo en el mercado de reaseguros en general.
De hecho, 59.000 millones de USD, es decir, el 58% de las pérdidas aseguradas para el periodo, fueron causadas por tormentas convectivas severas (TSE), y 21.000 millones de USD, es decir, el 21%, por ciclones tropicales.
Según Aon, en el tercer trimestre, las pérdidas fueron causadas por tres costosos huracanes, eventos de SCC en EE.UU. y Canadá, e inundaciones en Europa Central.
Además, Canadá está experimentando su mayor año de pérdidas de seguros jamás registrado, con la mayor parte del impacto procedente de cuatro eventos que se produjeron en un solo mes en el tercer trimestre, y se espera que las reclamaciones superen los 5.900 millones de dólares.
En el resto del mundo, el tifón Yagi, el más mortífero del año y el más caro jamás registrado en Vietnam, fue el tercero más dañino del periodo, según Aon.
Según Aon, a finales del tercer trimestre de 2024, las catástrofes naturales habían matado a unas 13.000 personas, la cifra más baja desde 1986.