El uso de la política cambiaria para resolver los desequilibrios estructurales cuando las reservas internacionales son suficientes es una decisión equivocada, según el primer subgobernador del Banco Nacional de Ucrania, Sergiy Nikolaychuk.
En una entrevista con Interfax-Ucrania, explicó que las principales razones de la rebaja de las previsiones de crecimiento del PIB y la revisión de la inflación en 2024 fueron el aumento de los riesgos de seguridad y el impacto de las condiciones meteorológicas en el rendimiento de los cultivos.
«Analizamos en detalle la dinámica de los ataques con misiles, los ataques con drones y la duración de los ataques aéreos. Por desgracia, este año la situación es mucho peor que el año pasado. Esto afecta directamente a la actividad empresarial y al potencial de la economía», declaró Nikolaychuk.
Según él, el déficit del comercio exterior es una «realidad objetiva» causada por la guerra, el aumento de las importaciones para cubrir las necesidades de defensa y energía, y la reducción de las oportunidades de exportación.
«Sería un error resolver estos problemas estructurales mediante la política monetaria cuando tenemos un nivel suficiente de reservas internacionales. Vemos otras vías: una política estatal más activa a través de aranceles, impuestos o barreras no aduaneras a las importaciones no críticas», subrayó.
El funcionario subrayó que el NBU continúa con la liberalización gradual de las divisas y ha proporcionado a las empresas herramientas para cubrir los riesgos cambiarios.