La Unión Europea (UE) cambiará las normas de entrada y salida en otoño: los ciudadanos de países no comunitarios deberán registrar sus huellas dactilares y sus imágenes faciales en la frontera.
Según informó el lunes la ONG MAPA, los cambios se debatieron en una reunión entre representantes de la Comunidad de Transporte y representantes de la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas en el Ministerio de Desarrollo Comunitario, Territorial y de Infraestructuras de Ucrania.
Los cambios afectarán al transporte y los viajes a 30 países europeos, según el comunicado.
«El primer cambio se refiere a la introducción del sistema de entrada-salida (SES). A partir de ahora, todos los ciudadanos no comunitarios deberán registrar sus huellas dactilares e imágenes faciales en la frontera. Este proceso comenzará este otoño», dijo el MAPA.
Otro cambio entrará en vigor a mediados de 2025: los viajeros tendrán que presentar una solicitud en línea al Sistema Europeo de Información sobre Autorizaciones de Viaje (ETIAS) antes de viajar y pagar una tasa de 7 euros.
El MAPA aclaró que, debido a estas innovaciones, las empresas de transporte tendrán que introducir cambios en sus sistemas de reserva, verificación de documentos y facturación de pasajeros y adaptar sus procedimientos operativos.