Esta semana, el Presidente chino visitará Francia, Serbia y Hungría. Su viaje se produce en un momento de tensas relaciones con muchos países europeos a causa del comercio y las acusaciones de espionaje chino.
El Presidente chino, Xi Jinping, visitará Europa esta semana por primera vez en cinco años, haciendo escala en Francia, Serbia y Hungría.
El viaje de Xi Jinping se produce en un momento de tensión con muchos países europeos por el apoyo de China a Rusia en la guerra de Ucrania, sus políticas comerciales y sus supuestas actividades de espionaje. El viaje será también una prueba para Europa, que intenta equilibrar sus relaciones con China y Estados Unidos.
Xi espera evitar una guerra comercial con la Unión Europea en medio de la creciente polémica sobre las exportaciones chinas de vehículos eléctricos y las restricciones al acceso de las empresas europeas al mercado chino. Xi también animará al presidente francés, Emmanuel Macron, a buscar una mayor autonomía respecto a Estados Unidos para debilitar el dominio global de Washington.
Esto es lo que sabemos sobre el viaje de Xi, que comenzó el domingo.
¿Qué importancia tiene el itinerario de Xi?
Según los expertos, los tres países que visitará Xi apoyan en mayor o menor medida el deseo de China de redefinir el orden mundial. Todos ellos cuestionan en mayor o menor medida el orden mundial de posguerra establecido por Estados Unidos e intentan estrechar lazos con Pekín.
Hungría mantiene estrechas relaciones con China e intenta atraer inversiones chinas en ámbitos como la fabricación de vehículos eléctricos y baterías, a medida que los fabricantes chinos se expanden fuera de Asia. Serbia también mantiene relaciones cordiales con Pekín y ha atraído inversiones chinas por valor de miles de millones de dólares.
La primera parada de Xi será Francia, donde Macron declaró recientemente que Europa «nunca debería ser vasalla de Estados Unidos» y ha convertido a Francia en un puente entre el Sur Global y las potencias occidentales.
A pesar de los éxitos de Pekín, Macron ha declarado que sigue estando más cerca de su aliado, Estados Unidos, que de China.
«Prefiero elegir mi relación con Estados Unidos, con China, y que no me la imponga una de las dos partes, que me empuja en una dirección o me arrastra en otra», declaró a The Economist. Y añadió. «Está muy claro que no somos equidistantes. Somos aliados de los estadounidenses».
En vísperas de la visita de Xi, los diplomáticos chinos habían expresado su esperanza de que los lazos entre Francia y China desempeñaran un papel destacado en las relaciones de China con Occidente.
Ursula von der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, asistirá el lunes a las conversaciones con Xi y Macron en París.
Este año también es simbólico para China y los tres países.
Es el 60º aniversario de las relaciones diplomáticas entre China y Francia y el 75º aniversario de las relaciones diplomáticas con Hungría.
Este año también se cumple el 25 aniversario del bombardeo de la OTAN contra la embajada china en Belgrado (Serbia) durante la guerra de Kosovo, que causó la muerte de tres periodistas chinos y desencadenó airadas protestas ante la embajada de Estados Unidos en Pekín. Los funcionarios chinos han seguido señalando el bombardeo como un signo de agresión de la OTAN y un ejemplo de por qué Rusia tenía razón al sentirse amenazada antes de decidir invadir Ucrania.
¿Cuándo fue la última vez que Xi visitó Europa?
La última vez que Xi visitó Europa fue en 2019, antes de la pandemia de coronavirus, tras lo cual pasó un tiempo en China, abandonando el país por primera vez en otoño de 2022.
El viaje de 2019 incluyó una colorida ceremonia en Roma para honrar la participación de Italia en el proyecto de infraestructura global de China, la Iniciativa Belt and Road, que tiene como objetivo expandir la influencia de China en el extranjero. Francia desplegó la alfombra roja para Xi en París y firmó más de una docena de contratos comerciales y gubernamentales por valor de miles de millones de euros, aunque Macron advirtió que «China está jugando con nuestras diferencias» y que «el periodo de ingenuidad europea ha terminado».
Xi también visitó Grecia, donde se comprometió a apoyar al país en su lucha con el Reino Unido por las esculturas del Partenón conocidas como los Mármoles de Elgin.
¿Cómo evolucionan las relaciones entre Europa y China?
Desde la última visita de Xi, se ha producido un creciente distanciamiento entre China y gran parte de Europa. La pandemia del coronavirus, el acercamiento de Pekín a Rusia y la represión de las minorías étnicas, así como el fuerte aumento de las exportaciones chinas, han desencadenado una reacción violenta contra China en muchos países europeos.
En los últimos años, China ha quintuplicado sus envíos de automóviles a mercados extranjeros, y la Unión Europea ha adoptado recientemente una postura más beligerante frente a las prácticas comerciales chinas. Las autoridades de la UE han iniciado una investigación que podría dar lugar a restricciones de las exportaciones chinas de paneles solares y han tomado medidas preliminares para limitar el comercio de productos chinos, incluidos vehículos eléctricos, turbinas eólicas y equipos médicos.
Italia también comunicó a China que dejaría de participar en su Iniciativa de la Franja y la Ruta, y el mes pasado, en el plazo de una semana, seis personas fueron acusadas en Europa de espiar para China, lo que indica una ofensiva contra el espionaje chino.
Al mismo tiempo, los países europeos tienen opiniones diferentes sobre cómo relacionarse con Pekín y aprovechar las oportunidades económicas, y algunos temen la imposición de aranceles europeos.
Macron y el canciller alemán, Olaf Scholz, también creen que la influencia de China será crucial para poner fin a la guerra en Ucrania.