NovaSklo planea comenzar la construcción de una planta de producción de vidrio flotado en la región de Kiev en marzo de 2026.
Según ha informado a la agencia Interfax-Ucrania el director general de NovaSklo, fundador de la empresa de inversiones EFI Group, Igor Lisky, al margen de la conferencia sobre la recuperación URC-2025, la inversión en el proyecto asciende a más de 240 millones de euros.
El proyecto se lleva a cabo con el apoyo de UkraineInvest y el Ministerio de Economía de Ucrania.
El proyecto prevé, en particular, la construcción de una planta con una capacidad de 24,8 millones de m2 de vidrio al año. La empresa permitirá reducir la dependencia de las importaciones de vidrio laminado y fabricará productos para la exportación.
Liski señaló que el proyecto podría amortizarse en 6-7 años.
Informó de que, para la ejecución del proyecto, se ha firmado en el marco de la conferencia un memorando entre NovaSklo y tres de los principales fabricantes europeos de equipos: Horn Glass Industries AG (Alemania), Zippe Industrieanlagen GmbH (Alemania) y Bottero S.p.A. (Italia), que, en particular, serán los principales proveedores de tecnología y equipos.
Según Liska, NovaSklo ya ha adquirido el terreno para la producción y ha comprado la licencia para la extracción de arena.
Al comentar los riesgos asociados a la construcción de una planta industrial en Ucrania, Liska señaló que «se trata de un proyecto simbólico importante, ya que es precisamente un símbolo de la reconstrucción de Ucrania».
«Los cristales rotos, las ventanas rotas son siempre un símbolo de decadencia y guerra. La nueva fábrica, que produce vidrio de alta calidad, es un símbolo de que los ucranianos tenemos futuro y que reconstruiremos Ucrania con el mejor vidrio y la mejor tecnología. Debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para que Ucrania tenga un futuro diferente», afirmó.
Liski señaló que el proyecto está a punto de cerrarse con la firma de los contratos de financiación con las entidades financieras.
«Es un proyecto con un buen margen, porque ahora todo el vidrio se importa, lo que supone un gran gasto en transporte. Este proyecto es eficaz y rentable. Creemos que se amortizará en 6-7 años», afirmó.