Las celebraciones con motivo del 35 aniversario de la Revolución de Terciopelo en Checoslovaquia, organizadas por la Embajada de la República Eslovaca, tuvieron lugar el 19 de noviembre en la capital de Ucrania.
El acto tuvo lugar en el Fairmont Grand Hotel Kyiv y contó con la asistencia de diplomáticos, representantes de las autoridades ucranianas y público en general.
El embajador de la República Eslovaca en Ucrania, Pavel Vizdal, dirigiéndose a los invitados al acto, señaló la importancia de la Revolución de Terciopelo para la historia moderna de Eslovaquia y la República Checa. En su discurso también se refirió a la guerra en Ucrania, recordando los 1000 días transcurridos desde el comienzo de la invasión a gran escala.
El embajador subrayó la necesidad de una resolución pacífica del conflicto, teniendo en cuenta la integridad territorial de Ucrania.
La Revolución de Terciopelo, que tuvo lugar en Checoslovaquia en noviembre de 1989, se convirtió en símbolo de una transición pacífica del totalitarismo a la democracia. Las protestas masivas contra el régimen comunista comenzaron el 17 de noviembre de 1989 y provocaron la caída del gobierno a finales de año. La revolución recibió el nombre de «revolución de terciopelo» por la ausencia de violencia, algo único en el proceso revolucionario de Europa del Este.
Las relaciones diplomáticas entre Ucrania y la República Eslovaca se establecieron el 1 de enero de 1993, tras el colapso de Checoslovaquia y la proclamación de la independencia eslovaca. Desde entonces, ambos países cooperan activamente en los ámbitos político, económico y cultural.
Fuente: https://interfax.com.ua/news/diplomats/1028911.html