El sector de la cirugía plástica y reconstructiva se está convirtiendo en uno de los motores más importantes de la medicina privada y la economía regional de Ucrania, a pesar de la guerra. Así lo demuestran los datos globales del sector y los proyectos de infraestructura que se están llevando a cabo en el país, según ha informado el cirujano plástico y fundador de la clínica Lita Plus, Sergey Derbak.
Según la encuesta ISAPS Global Survey 2023, cada año se realizan más de 33 millones de procedimientos estéticos en todo el mundo, y el mercado global de la cirugía plástica y la medicina estética en 2024 se estima en aproximadamente 67 000 millones de dólares, con una tasa de crecimiento del 28-30 % anual. Solo en Turquía, los ingresos del sector del turismo médico en el segmento de la cirugía plástica alcanzan los 2000-3000 millones de dólares al año, y en total la industria crea más de un millón de puestos de trabajo en sectores afines, desde el transporte y la hostelería hasta la farmacia y la logística.
«La cirugía plástica ha dejado de ser una especialidad médica minoritaria. Ya es una industria en toda regla que crea puestos de trabajo, genera ingresos fiscales, desarrolla las regiones y devuelve dinero a la economía del país», señaló Derbak.
Según él, los cirujanos plásticos ucranianos gozan de un alto nivel de confianza por parte de los pacientes y la comunidad profesional, participan en congresos internacionales y trabajan según protocolos mundiales, mientras que el coste de las operaciones en Ucrania es entre 2 y 4 veces inferior al de la República Checa, Austria o Alemania. Esto contribuye al regreso gradual de los pacientes que, en los primeros años de la guerra, se operaban en el extranjero.
Por separado, el experto señaló el potencial de Transcarpatia como futuro centro médico. En Uzhhorod está a punto de finalizar la construcción del centro de cirugía plástica de alta tecnología Lita Plus, diseñado siguiendo la lógica de los principales centros médicos europeos.
«Transcarpatia tiene el potencial de convertirse en un potente centro médico gracias a su logística, su proximidad a la UE y su entorno propicio para la recuperación. Estamos construyendo una clínica que podrá acoger a pacientes de toda Ucrania y del extranjero. Esto supondrá nuevos puestos de trabajo, negocios satélites y un efecto económico sostenible para la región», afirmó Derbak.
Según sus estimaciones, una gran clínica especializada en cirugía plástica puede crear entre 80 y 120 puestos de trabajo en la primera fase, desde médicos, anestesistas y personal sanitario hasta administradores, logistas y servicios de atención al cliente, además de garantizar unos ingresos fiscales sostenibles gracias al trabajo en el sector «blanco». El gasto de los pacientes y sus acompañantes en hoteles, transporte, restaurantes, rehabilitación, servicios de belleza y productos farmacéuticos genera un efecto económico adicional.
«Tras el traslado de la clínica a Uzhhorod, ya hemos creado decenas de puestos de trabajo, algunos de ellos para residentes locales. Parte de los especialistas son médicos que hemos formado en nuestra propia base. No solo invertimos en edificios y equipos, sino también en el desarrollo del personal de la región», subrayó el fundador de Lita Plus.
El experto considera realista un escenario en el que Ucrania, a medio plazo, pueda ocupar el nicho de centro médico de Europa del Este entre Turquía y los países de la UE, siempre que se desarrolle una red de clínicas privadas de alta tecnología, se mantenga la competitividad de los precios, se invierta en logística y se promueva de forma sistemática el turismo médico.
Según él, los nuevos proyectos en la medicina privada no solo suponen la apertura de otra clínica, sino también la señal del inicio de una nueva etapa en el desarrollo de la «economía médica» de Ucrania, donde la cirugía plástica y estética se convierte en un recurso económico independiente, una fuente de puestos de trabajo, impuestos, inversiones y el retorno de pacientes y fondos que antes se iban al extranjero.