La economía de Ucrania podría crecer alrededor de un 4 % en 2025, pero las perspectivas siguen siendo frágiles y dependen totalmente de factores externos. Así se afirma en el último informe del Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo (BERD) titulado «Perspectivas económicas regionales: bajo presión».
Según el documento, la principal fuente de apoyo a la economía ucraniana es la ayuda financiera internacional destinada a cubrir los gastos presupuestarios, las prestaciones sociales y la defensa. Otro motor de crecimiento es la exportación de productos agrícolas a través de los «corredores de solidaridad» de la UE y rutas alternativas por el Danubio y por tierra, lo que compensa en parte las restricciones al transporte marítimo.
También se observa una recuperación gradual de las infraestructuras, incluidas las carreteras, los puentes y el sistema energético, lo que contribuye a la actividad económica.
Al mismo tiempo, el BERD advierte de los altos riesgos. Entre ellos se encuentran la prolongación de la guerra, el alto nivel de deuda pública e inflación, así como la vulnerabilidad de los flujos de exportación, que podrían reducirse drásticamente en caso de bloqueo de las rutas marítimas.
Según los expertos del banco, las áreas prometedoras para Ucrania siguen siendo la digitalización de los servicios públicos, la tecnología agrícola y el desarrollo de las energías renovables. Sin embargo, para ello es necesario que haya una paz duradera o que se congele el conflicto, que se profundice la integración con el mercado de la UE y que se avance en las reformas judiciales y anticorrupción.
A finales de 2024, el PIB de Ucrania se estimaba en unos 160 000 millones de dólares. Más del 60 % de las exportaciones correspondían a productos agrícolas (cereales, oleaginosas y productos transformados). Con la recuperación de la producción, también se mantiene el potencial de la metalurgia, las tecnologías de la información y la energía.
El BERD subraya que la economía ucraniana «se encuentra bajo presión», pero que, si se mantiene el apoyo internacional y el acceso a los mercados externos, puede experimentar un rápido crecimiento, sentando las bases para la transformación posguerra.