Las compras reales de oro por parte de China en el año en curso pueden superar varias veces los volúmenes declarados oficialmente y ya se han convertido en uno de los principales impulsores del crecimiento récord de los precios del metal precioso, escribe el Financial Times, citando a analistas y datos del mercado.
Según las estadísticas oficiales del Banco Popular de China, en 2025 el regulador adquirió solo unas 25 toneladas de oro, mientras que en algunos meses el aumento de las reservas fue de aproximadamente 2 toneladas. Sin embargo, los analistas de Société Générale, al evaluar los flujos comerciales de lingotes grandes y los datos de importación, creen que el volumen real de compras de Pekín podría alcanzar las 250 toneladas al año, es decir, más de un tercio de la demanda total de los bancos centrales mundiales. Según sus estimaciones, las compras reales podrían superar en diez veces o más las cifras oficialmente divulgadas.
El director de la Asociación Japonesa del Mercado de Metales Preciosos, Bruce Ikemizu, afirmó que los participantes en el mercado este año «prácticamente no creen en las estadísticas oficiales, especialmente en lo que respecta a China», y estima que las reservas actuales de oro del país ascienden a casi 5000 toneladas, aproximadamente el doble del nivel que las autoridades chinas comunican públicamente.
Según datos del FT y de expertos, una parte significativa de las compras se realiza de forma opaca, a través de la Administración Estatal de Divisas (SAFE), el fondo soberano China Investment Corporation y otras estructuras que no están obligadas a publicar informes detallados sobre las reservas de oro. Esto dificulta la evaluación de la magnitud real de las operaciones y aumenta la incertidumbre en el mercado.
Los analistas señalan que el aumento encubierto de las reservas de oro está relacionado con la estrategia de desdolarización. «China compra oro como parte de su estrategia para reducir su dependencia del dólar», afirma Jeff Currie, estratega de Carlyle, según la prensa. El oro se considera un instrumento de cobertura frente a los riesgos monetarios y geopolíticos, entre otros, en el contexto de las tensiones en las relaciones con Estados Unidos.
Según las estimaciones del Consejo Mundial del Oro, en la última década la proporción de oro en las reservas internacionales de países fuera de Estados Unidos ha aumentado aproximadamente del 10 % al 26 %, lo que ha convertido al metal en el segundo activo de reserva más importante después del dólar estadounidense. Las compras a gran escala de los bancos centrales han contribuido a que el precio del oro supere los 4300 dólares por onza troy, según señalan el FT y las publicaciones del sector.
China sigue siendo el mayor productor y consumidor de oro del mundo, con alrededor del 10 % de la producción mundial, lo que permite a Pekín aumentar sus reservas no solo mediante las importaciones, sino también a través del mercado interno.