El primer ministro húngaro, Viktor Orban, ha afirmado que su gobierno no aplicará el Pacto de Migración y Asilo de la UE y no tiene intención de aceptar inmigrantes en régimen de reubicación. «Mientras Hungría tenga un gobierno patriótico, no aplicaremos el pacto migratorio. No aceptaremos migrantes y no gastaremos ni un céntimo en ellos», escribió Orban en X el miércoles.
La declaración se produce en medio de una iniciativa anunciada por la Comisión Europea para reubicar a los solicitantes de asilo de los países más presionados -España, Italia, Grecia y Chipre- en otros Estados de la UE.
Varios países, entre ellos Hungría, Polonia y Eslovaquia, se han opuesto a participar en este plan.
Anteriormente, Orban había criticado repetidamente los mecanismos paneuropeos de asignación de migrantes y amenazado con demandar a la Comisión Europea si se imponían cuotas obligatorias de reasentamiento.
La Directora General de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), Amy Pope, afirmó que Ucrania necesita un plan para atraer a los migrantes al país, aunque regrese un número significativo de refugiados ucranianos, según declaró en la Conferencia para la Recuperación de Ucrania (URC2025) celebrada en Roma (Italia).
«Ucrania necesita un plan para atraer inmigrantes al país.
Porque incluso si logramos convencer a los ucranianos de que vuelvan a casa, creo que seguiremos necesitando millones de trabajadores para reconstruir Ucrania.
Necesitamos proporcionar rutas legales y seguras para la migración al país», dijo el Papa.