En Dubái ha comenzado la construcción de uno de los rascacielos residenciales más insólitos del mundo: la torre Muraba Veil, que con una altura de unos 380 m tendrá solo unos 22,5 m de ancho, es decir, prácticamente «un solo apartamento» en la fachada. El proyecto lo lleva a cabo el promotor Muraba con la participación del estudio español RCR Arquitectes, ganador del Premio Pritzker 2017. La torre será un edificio residencial de 73 plantas con 131 apartamentos de lujo, de dos a cinco dormitorios, cada uno de los cuales ocupará toda la anchura de la planta y tendrá vistas panorámicas de Dubái y del canal.
El motivo visual principal de Muraba Veil es un «velo» metálico. La fachada estará envuelta en una cubierta semitransparente de acero inoxidable perforado, que filtra la luz solar y refleja el color del cielo, que cambia a lo largo del día. Según la idea de los arquitectos, se trata de una interpretación moderna de la tradicional celosía árabe mashrabiya, que proporciona privacidad y sombra natural al mismo tiempo.
Las distribuciones se inspiran en la tipología de la casa árabe clásica: desde la capa exterior, con dormitorios y terrazas, el espacio pasa gradualmente a un «núcleo interior» más fresco, donde se encuentran las zonas comunes y los patios ajardinados, que son auténticos oasis. Esto permite reducir de forma natural la temperatura y disminuir la carga sobre los sistemas de aire acondicionado.
Muraba Veil se está construyendo junto a la autopista Sheikh Zayed Road y da al Dubai Water Canal, en una de las pocas zonas verdaderamente peatonales de la ciudad, con paseos marítimos, pistas para correr y carriles bici, cafeterías y rápido acceso a Kite Beach.
El proyecto será el quinto proyecto conjunto de Muraba y RCR Arquitectes y está previsto que se complete en diciembre de 2028. El precio inicial de los apartamentos en Muraba Veil se ha fijado en 18 millones de dirhams (unos 4,9 millones de dólares), lo que automáticamente sitúa al proyecto en el segmento de viviendas de lujo y le confiere el estatus de una de las direcciones más caras del emirato.
Muraba Veil encaja en la estrategia a largo plazo de Dubái para consolidar su estatus de líder mundial en la construcción de rascacielos y edificios emblemáticos. La ciudad ya cuenta con el edificio más alto del planeta, el Burj Khalifa, y el recientemente anunciado segundo rascacielos más alto, el Burj Azizi; además, Dubái concentra el mayor número de torres de más de 300 m del mundo.