Argentina eligió el domingo 19 de noviembre como nuevo presidente al libertario Javier Miley, comprometido con posturas radicales para solucionar la profunda crisis económica del país, informó Reuters.
«Según los resultados oficiales, Miley obtuvo casi el 56 por ciento frente al 44 por ciento de su rival, el ministro de Economía peronista Sergio Massa», dijo la agencia.
Se señala que Miley promete llevar a cabo una terapia de choque en la economía argentina. Promete cerrar el banco central, abandonar el peso y recortar el gasto, reformas potencialmente dolorosas que han resonado entre los votantes enfurecidos por la crisis económica.
«El nuevo presidente de Argentina tendrá que lidiar con las arcas vacías del Gobierno y del Banco Central, un programa de deuda de 44.000 millones de dólares con el Fondo Monetario Internacional y una inflación que se acerca al 150%», subraya la agencia.
Además, escribe Reuters, una victoria de Miley cambiaría el panorama político y el esquema económico de Argentina, y podría afectar al comercio de cereales, litio e hidrocarburos. Además de todo esto, Miley ha criticado a China y Brasil, afirmando que no tratará con «comunistas», y se muestra partidario de estrechar lazos con Estados Unidos.